El pasado 17 de junio de 2020, en el Regimiento Logístico N°2 Arsenales de Guerra, ubicado en Colina, una soldado conscripto de 20 años denunció haber sido víctima de abuso sexual por parte de un sargento enfermero. Según los antecedentes judiciales, el imputado habría cometido actos de significación sexual en contra de la joven utilizando la fuerza, lo que incluye tocamientos y contacto físico no consentido.
Detalles del caso
El sargento habría realizado los actos mientras se desempeñaba como encargado de la enfermería de la unidad. Según el relato de la víctima, expuesto en un reportaje de 24 Horas, la noche en que ocurrieron los hechos, el sargento le habría dado un calmante y, cuando ella estaba acostada, ingresó a su habitación.
En el mismo reportaje, TVN entrevistó al coronel Claudio Paredes, quien señaló: “Reunimos a todas las mujeres para ver si había ocurrido algún hecho anterior y efectivamente aparecieron dos soldados más que hicieron presente que hubo situaciones que fueron bastante incómodas para ellas, justamente con el mismo sargento, por ende se le tomó declaración a las dos soldados y se incorporaron dentro de todo al paquete de antecedentes que fue enviado a la Fiscalía y a la PDI como antecedentes anteriores del sargento”.
Audiencia de Juicio Oral
A más de cuatro años del hecho, el juicio oral programado para este miércoles 20 de noviembre de 2024 fue nuevamente suspendido. Según indica la madre de la víctima, quien conversó en exclusiva con Chicureo Hoy, la audiencia fue aplazada debido a la presentación de un certificado médico por parte del abogado defensor del acusado. “La audiencia de juicio oral la verdad de las cosas es que no se hizo, nosotros estuvimos en una sala esperando, pero después llegaron con la información de que se había suspendido”, señaló.
La madre de la joven expresó su frustración por la demora en el proceso, destacando que este no es el primer aplazamiento del caso. “La primera audiencia de juicio oral, el tipo no se presentó, tampoco su abogado, tuvimos que esperar otra fecha de audiencia de preparación y ahí se tuvo que presentar porque estaba con una orden de arresto”, agregó.
El constante retraso en la resolución del caso ha generado incertidumbre y desgaste emocional en la familia de la víctima. “Esto que estamos viviendo no es vida. Llevo años con una ansiedad terrible, hablando con abogados, pendientes de las audiencias (…) esto me tiene desgastada física y emocionalmente, lo único que queremos es que se haga justicia, que este hombre pague con cárcel y que podamos descansar de todo esto”, afirmó la madre visiblemente afectada.
Aplazamiento del juicio
La audiencia, que inicialmente se realizaría este mes, quedó programada para agosto de 2025, lo que prolonga aún más el sufrimiento de la víctima y su familia. Ante esta situación, la madre manifestó su desconfianza sobre las razones detrás de los retrasos: “No sé si será normal o realmente pasa algo raro por detrás. A estas alturas, uno no sabe qué pensar”.
La familia también busca que el imputado asuma responsabilidades económicas por los gastos asociados al caso, que incluyen honorarios legales, transporte y tratamientos médicos. “No estamos buscando plata, pero creo que es justo. Todo este daño y los gastos que hemos tenido deben ser recompensados”, concluyó la madre.
El caso sigue en espera de resolución, mientras la familia insiste en que se garantice un juicio justo y sin más postergaciones. CHH