La ministra de Salud, María Begoña Yarza, descartó que el plan de inmunización del Gobierno contemple a los bebés desde los seis meses, pese a que el Instituto de Salud Pública (ISP) autorizó, esta semana, tres vacunas contra el COVID-19 para que sean aplicadas en este grupo etario.
La secretaria de Estado valoró la autorización del ISP, pero enfatizó en que la autorización de la vacuna no es vinculante con el plan de vacunación, el que actualmente considera a los niños de tres años o más en adelante.
«Tenemos una entidad reguladora muy prestigiosa, que es el ISP, que es tipo 4, lo que significa que es de muy buen nivel, y esa agencia habitualmente va evaluando medicamentos, dispositivos sanitarios y vacunas. En esta ocasión, evaluó la eficacia y seguridad de las vacunas en relación a un rango etario distinto, desde los 6 meses, y evaluó positivamente la utilización de las vacunas en tanto eficacia y seguridad. Eso no guarda relación, no es vinculante con el plan nacional de vacunación», explicó.
«El plan nacional de vacunación es desde el Ministerio de Salud, con los equipos del plan nacional y esto no es vinculante. Es una rutina que hace el ISP y me parece que es súper buena noticia que esas vacunas también sean seguras para los niños desde los seis meses», complementó.
El martes, el ISP informó que aprobó las vacunas de los laboratorios Pfizer, Sinovac y Moderna para que sean aplicadas en bebés desde los seis meses.
El organismo precisó que para la vacuna de Pfizer, las dos primeras dosis deben ser administradas con intervalos de tres semanas, junto a una tercera dosis con al menos ocho semanas de diferencia después de la segunda.
Para Moderna, las dos primeras dosis deben ser con un intervalo de 28 días y con Sinovac se aconsejó una diferencia de entre 14 y 28 días con el esquema inicial. CHH