La Alta Comisionada de la Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, reconoció que, si bien las libertades cívicas siguen restringidas en Venezuela, existen mejoras tras la aceptación de Nicolás Maduro a colaborar con el organismo y permitir el trabajo en el país.
Mediante un informe sobre las actividades de su oficina en Venezuela, la expresidenta de Chile indicó que entre mayo de 2021 y abril de este año se documentaron 166 casos de restricciones indebidas, entre ellas casos de criminalización y amenazas en contra de disidentes.
Además, se registraron 34 violaciones de la libertad de expresión, constatándose situaciones de acoso, censura y confiscación de equipos profesionales, el bloqueo de portales web, el uso de la legislación antiterrorista para obstruir el trabajo de defensores de DDHH y periodistas.
La oficina visitó 21 centros de detención, realizó 259 entrevistas confidenciales con detenidos y se obtuvo la liberación de 68.
En el informe, la alta comisionada destaca algunos avances en el país como que no se hayan registrado muertes en protestas pacíficas relacionadas principalmente con la situación socioeconómica, como si ocurrió en el 2017.
Asimismo, se informó de la disminución en las detenciones arbitraria y se determinó que hubo “menos muertes en el contexto de operaciones de seguridad que en años pasados”, aunque “de todos modos, una sola muerte es demasiado”, recalcó.
Otras de las situaciones positivas que destaca del Gobierno venezolano es la disolución de las Fuerzas de Acción Especial (FAES) de la Policía, asegurando que esta es una oportunidad para “reforzar la naturaleza civil de las fuerzas de seguridad”.
También mencionó el procesamiento de militares y policías involucrados en siete muertes en las protestas de 2017, así como el hecho de que el fiscal general haya compartido información sobre algunos casos.
Por otro lado, lamentó que las autoridades ya no permiten el acceso del personal de su organismo a las prisiones de Helicoide y Boleita, donde consideró que hay riesgo de malos tratos y de detenidos incomunicados.
Este fue el último informe que Bachelet presenta ante el Consejo de Derechos Humanos sobre Venezuela, ya que el próximo 31 de agosto concluirá su mandato como alta comisionada de la ONU. CHH
