Este lunes, al menos 20 personas, entre ellos nueve niños, murieron en la Franja de Gaza durante un bombardeo de las fuerzas militares de Israel, según aseguró el ministerio de Sanidad de Gaza, territorio palestino gobernado por el movimiento islámico Hamás.
El ataque aéreo se produjo luego que desde Gaza se lanzaron decenas de cohetes hacia Jerusalén, donde fue evacuada la sede del Parlamento de Israel. Las tensiones entre ambos se exacerbaron durante los últimos días, luego que más de 300 palestinos resultaron heridos la mañana de este lunes en enfrentamientos con la policía israelí en Jerusalén.
El portavoz de las fuerzas israelíes, teniente coronel Jonathan Conricus, declaró: “hemos empezado, y digo bien empezado, a atacar objetivos militares en Gaza”, asegurando que se prevé que “la escalada dure un tiempo prolongado”. “Tenemos la capacidad, la autoridad y la intención de dar un fuerte golpe a Hamás”, enfatizó.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) emitieron un comunicado informando: «después de que los terroristas en Gaza dispararan una ráfaga de cohetes contra el centro y sur de Israel durante las últimas horas, acabamos de atacar a tres terroristas de Hamas en Gaza».
Según informó la BBC, el comandante de Brigadas de Ezzeldin Al-Qassam, Mohammed Abdullah Fayyad, había fallecido en el ataque. Además, se registraron más de 65 heridos en el bombardeo.
Tras esto, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que «esto es algo que nuestro equipo de seguridad nacional está monitoreando de cerca, obviamente, en todo el gobierno, ciertamente el Presidente se mantiene al tanto y también lo está observando de cerca». CHH
