Foto: @PDI_CHILE
La Coordinadora Arauco Malleco se refirió a la detención del líder de la agrupación, Héctor Llaitul, acusando una “persecución política en contra de nuestro proyecto” y llamaron a las comunidades a comenzar “nuevos procesos de recuperación en contra del gran capital, a través de un verdadero control territorial”.
Esto luego que la Policía de Investigaciones haya materializado este miércoles la detención de Llaitul en un restaurante de Cañete, en la región del Bío Bío.
A través de un comunicado difundido en Werken Noticias, cuestionaron al Gobierno, al que calificaron de “pseudo izquierda” y de dar “continuidad a lo que fue antes la Concertación”.
“Una vez más su administración al servicio de las oligarquías y conglomerados económicos que tienen sus intereses puestos en nuestro territorio ancestral mapuche. Claro ejemplo de esto es la designación de operadores políticos de inteligencia como lo son Manuel Monsalve, Humberto Toro y demás personas en su gabinete que vienen de la formación de Mahamud Aleuy y que, a lo largo de estos años, no han hecho más que cuadrarse siempre con el empresariado”, dicen en el escrito.
Según la organización, con la detención de Llaitul, desde el Gobierno buscan “amedrentar el proyecto político-estratégico que llevan adelante familias, comunidades y weichafe dignamente. Quienes, masivamente, hemos vuelto a ocupar territorios que hasta ahora estaban bajo control de la industria forestal y el latifundio”.
De esa misma forma, declararon esta acción como “la materialización de la persecución política en contra de nuestro proyecto político, el cual ha permeado en comunidades que hoy mantienen en jaque la presencia de la industria forestal principalmente”.
También explican que esta detención es un punto de inflexión para el movimiento mapuche autonomista revolucionario, ya que, según indican, “a nosotros nos quieren callar por tener una verdad incontrarrestable de no dialogar si no es por territorio y autonomía”.
Finalmente, hicieron un llamado a las comunidades a “continuar y comenzar nuevos procesos de recuperación en contra del gran capital, a través de un verdadero control territorial. A continuar con la resistencia y sabotajes en contra, principalmente, de la industria forestal, hidroeléctrica, minera y salmonera. A no dejarse amedrentar por este gobierno que se ha puesto de rodillas ante el empresariado y que, a través de su plan de buen vivir, busca cooptar y dividir a nuestra gente”. CHH