El viernes recién pasado, una vecina del condominio El Torreón, ubicado en Chamisero, fue testigo de las piedras que aterrizaron en el patio de su jardín producto de las explosiones que se realizan en Las Canteras.
En ese momento, cuatro niños jugaban en el patio y las piedras pasaron a pocos centímetros de sus cabezas, según explicó a Chicureo Hoy.
Rolando Abarca, director de la Asociación de Canteros de Colina, aseguró a Chicureo Hoy que el trabajo que vienen realizando hace años está regulado. Hoy en día, cuentan con cuatro explosiones a la semana, las que se realizan de lunes a jueves, pero les llama la atención que el hecho se haya producido el viernes. “Si fue el día viernes, obviamente fue alguien que se salió de las normas, porque nosotros estamos regulados. (…) Sí nos preocupa la salud de la gente, por lo que nosotros estamos haciendo una investigación interna”, indicó.
Sin embargo, Abarca señala que no tienen información del hecho, ni tampoco saben en qué casa fue, por lo que están esperando a que se les proporcione la información necesaria para saber detalles de lo ocurrido.
Bajo el mismo contexto, Abarca afirma que existe una mensura minera y que a partir del límite de este territorio debe calcularse una distancia de 100 metros hasta la ubicación de las casas, en la cual no puede construirse. “Ahí no se puede construir, pero lo más grave de todo es que las casas están dentro de la mensura minera”, indica.
Además, agregó que “es nuestro trabajo y estamos bajo la ley, obviamente no queremos que salga alguien dañado, pero también tienen que entender que están viviendo donde no tienen que vivir”, atribuyendo el problema a las inmobiliarias de las casas.
Sobre el hecho, uno de los concejales de Colina, Andrés Vásquez (DC), señaló a Chicureo Hoy que “la situación es compleja, pudo haber pasado a mayores”.
“Entiendo que una parte del condominio es parte de la pertenencia minera que los canteros poseen para realizar su trabajo, no existe una distancia de seguridad entre el límite de la pertenencia y las casas. Aquí hay otras responsabilidades: de la inmobiliaria, del municipio que otorgó los permisos de construcción y por último, que probablemente a los vecinos que compraron sus casas nunca se les informó que estaban comprando al lado de una pertenencia minera. Estoy con los vecinos, pero creo que también hay un tema anterior”. CH H
