Han pasado algo más de seis meses desde que Camilo Catrillanca falleció en medio de un operativo policial en la comuna de Ercilla. La muerte del comunero Mapuche generó rechazo transversal en la opinión pública y se convirtió en un símbolo potente de la causa mapuche en La Araucanía.
El sargento Carlos Alarcón, fue formalizado por la muerte del joven mapuche y transcurrido todo este tiempo decidió hablar de cómo ocurrieron los hechos el 14 de noviembre pasado. «Nos comunicaron que los individuos se estaban bajando de los vehículos robados y empezaron a dar sus características. También indicaron que dos de ellos se subieron a un tractor azul», señaló .
Dentro de las declaraciones que dio a la Revista Sábado, el sargento manifestó que cuando dio con el tractor gritó «Alto, Carabineros. Párate ahí, párate ahí. Entonces el tipo se dio a la fuga y se me pasó la brillante idea de hacerle puntería a una zona baja del tractor, que es una pala metálica. Yo dije: ‘Lo voy a hacer para que los tipos desistan de la huida’. (…) Si hubiese estado claro en la intención de matar a las personas, lo hago cuando los tuve en frente».
Sobre lo vivido posterior al impacto a Catrillanca, el sargento Alarcón dijo que «cuando vi a Camilo sentado en el asiento del conductor, con la cabeza inclinada hacia la derecha y con la herida. Pasaron mil pensamientos. Dije: ‘la puedo hacer cortita y me pongo el fusil debajo de mi boca y me disparo’. Se me pasó eso por la mente, por muy cristiano que sea. Me hubiese ahorrado todos estos malos ratos que estoy haciendo pasar».
Por último, el uniformado agregó que «le diría a Marcelo Catrillanca que lamento mucho cómo terminó ese procedimiento. Muchas veces he tenido la intención, si se me da la oportunidad, de hablar con él personalmente. Le pediría perdón, no asumiendo que fui yo el que le quitó la vida a su hijo, pero pido perdón por haber participado en ese procedimiento. Por haber causado dolor a esa familia». CHH
