Este jueves, Estefanía Gutiérrez, la madre de Tomás Bravo -el niño de 3 años cuyo rastro se perdió el miércoles 17 de febrero en una zona rural de Lebu-, anunció que se querellará en contra de la vidente que la acusó de asfixiar a su hijo.
«Muchas videntes decían que (el menor) estaba en un río, que estaba pidiendo ayuda, que estaba en una quebrada, otro que estaba cerca del mar. Bueno, como hubo una vidente que no está bien de su cabeza, dijo que yo había asfixiado a mi hijo», aseguró Gutiérrez en conversación con Canal 13.
Por esto, la mujer aseguró que tomará «acciones cuando aparezca mi hijo, porque yo sé que va a aparecer. Voy a tomar acciones legales contra esa mujer», afirmó, destacando que «fue lo peor que escuché en toda mi vida».
Cabe destacar que esta es la octava jornada de búsqueda de menor, operativo al que se han sumado diversos equipos especializados, entre ellos un avión de la Fuerza Aérea de Chile, FACH, que obtuvo imágenes en alta resolución para esclarecer si hay señales de que el pequeño todavía se encuentre en la zona.
Pese a esto, el fiscal a cargo del caso, José Ortiz, comentó ayer que las personas que inicialmente ayudaron a buscar indicios de Tomás «destruyeron el sitio del suceso» de manera accidental, razón por la cual el trabajo ha sido más difícil para las autoridades.
Por otra parte, el persecutor aseguró que la investigación sobre el menor es de carácter reservado durante 40 días, «a fin de evitar la contaminación y evitar levantar teorías o castillos de arena que puedan dificultar más aún, después de todas las dificultades que hubo al inicio, con la alteración del sitio del suceso». CHH
