Este sábado, el presidente (s) del Colegio Médico (Colmed), Patricio Meza, se refirió a la polémica que se desató luego de que se confirmara el incumplimiento del protocolo sanitario por parte de la mujer que viajó desde Estados Unidos al país, portando el primer caso de la variante Delta del Covid-19.
Según información inicial, la viajera habría permanecido 5 días en el hotel de tránsito -tal como estipula la norma-, sin embargo, después de que el Municipio de San Javier denunciara que dicha versión no era verídica, el Ministerio de Salud (Minsal) aclaró que, debido a «razones humanitarias», la mujer solo permaneció una noche en el hotel y, posteriormente, viajó en auto particular hasta la región mencionada.
«Ella vino al funeral de su padre y esa es una razón humanitaria muy importante y, aquellos que practican el humanismo cristiano, deberían entender que aquí había una razón humanitaria, de caridad y de compasión con esta familia», dijo al respecto el ministro de Salud, Enrique Paris.
Horas más tarde, Meza criticó los dichos del secretario de Estado y aseguró que hay «muchas historias de personas que, estando en Chile o en el extranjero, se vieron privadas de despedir a sus seres queridos, justamente porque cumplieron esos protocolos, pero ahora se habla que por ‘humanismo cristiano’, como dijo el ministro, se otorgó este permiso».
«Al no respetarse los protocolos, expone a todo un país a un ingreso más prematuro de esta variante, que pudiese tener un impacto muy grave en el manejo de la pandemia. Por otro lado, también nos demuestra que en Chile no todos son iguales, hay algunos que tienen privilegios que otros no tienen», sentenció el presidente subrogante del Colmed en conversación con Cooperativa.
Asimismo, la autoridad enfatizó que «la variante Delta no reconoce, no marca ninguna diferencia al ‘humanismo cristiano’ y afecta a todos por igual. Esto abre la inquietud y la pregunta que todos nos hacemos: ¿Cuántas veces se han vulnerado estos protocolos? ¿Cuántas veces usando criterios que no son sanitarios se ha permitido que se realicen actividades que ponen en riesgo la salud pública?», cuestionó.
«Creemos que deberían invitar a todos los actores, no solo a discutir las consecuencias sociales y económicas, sino que se sienten las personas entendidas a discutir la mejor estrategia que pueda permitir el mejor manejo de la pandemia», expresó Meza.
Cabe destacar que, durante esta jornada, la subsecretaria de Salud, Paula Daza, explicó que «si bien el Ministerio ha dictado una norma de carácter general que dispone las condiciones que deben cumplir las personas que ingresen al país, la autoridad sanitaria siempre tiene la facultad de ponderar caso a caso las diversas variables sanitarias que hacen recomendable que, en una situación en particular, el aislamiento se realice en un lugar distinto al hotel de tránsito».
«En este caso en particular, se tomó la decisión de otorgarle un permiso humanitario excepcional por la delicada situación emocional y familiar que estaba pasando la persona, pero antes de autorizar su traslado se confirmó que contara con un nuevo PCR negativo y que se movilizara en vehículo particular, además de exigir que realizara la cuarentena en su domicilio, donde nadie podrá entrar ni salir del hogar, es decir, toda la familia con que vive la persona debe permanecer en cuarentena», según detalló Daza. CHH