Parecía que el Bayern Munich hacía la tarea de visita. El partido de ida había sido igualado y el 2 – 1 en contra se transformó en una igualdad que debía ser resuelta en alargue, pero fue precisamente en el tiempo extra que los fantasmas aparecieron nuevamente y los Alemanes terminaron perdiendo de la peor forma.
La clasificación a la ronda de semifinales estuvo marcada por la expulsión de Arturo Vidal, quien recibió tarjeta roja antes de que terminara el tiempo reglamentario, a los 84 minutos.
Luego en la prorroga el desgaste físico hizo lo suyo y los germanos con uno menos doblaron los esfuerzos sin embargo el cuadro merengue fue contundente y cerró el encuentro con un 4 a 2, quedando así instalado entre los 4 mejores de Europa.