Hace unos días, la Corporación Nacional Forestal, Conaf, advirtió que existe la probabilidad de que la temporada de incendios forestales en La Araucanía -que usualmente comienza a fines de octubre- se adelante producto del déficit hídrico, lo que podría generar que los bosques estén más propensos a quemarse y propagar el fuego.
Ante esto, el ministro de Agricultura, Antonio Walker, visitó dicha región y pronosticó que las condiciones meteorológicas traen consigo un augurio negativo. «Tenemos que ir preparándonos porque se nos viene una temporada que va a venir durísima. El pronóstico de altas temperaturas es a partir de las primeras semanas de octubre y noviembre”, afirmó la autoridad.
Asimismo, anunció que se invertirán cerca de 72 mil millones de pesos con tal de «aumentar el número de brigadistas en todo el país, llegando a los 2.500 a nivel nacional», para así contar con el personal necesario para frenar oportunamente dichos incendios.
Por último, llamó a la ciudadanía a no cometer «siniestros intencionales». «La intencionalidad histórica de los incendios forestales es de un 33%, sin embargo, en la temporada anterior, el 60% de los incendios en las regiones de Ñuble, Bío Bío y La Araucanía fue intencional», sentenció el ministro. CHH
