Esta semana, la Confederación de Estudiantes de Chile, Confech, hizo un llamado a paralizar las clases virtuales con tal de que las autoridades acojan sus demandas, entre ellas, el congelamiento o rebajas de arancel y del CAE y la entrega de chips y módems para las reuniones en línea.
Durante este fin de semana, la organización terminará de afinar el petitorio que detalla exactamente cuándo y cómo será la movilización y qué exigencias específicas se esperan abordar, sin embargo, ya advirtieron sentirse abandonados por parte del Ministerio de Educación.
Sin ir más lejos, y tal como indicó la vocera de la Confech, Catalina Magaña, en entrevista con Emol, se calcula que cerca de 30 mil estudiantes han debido abandonar sus estudios por la imposibilidad de financiarlos. «El que hayan abierto nuevos procesos para postulación al CAE no responde a las necesidades que tenemos. Las fuentes laborales nuestras, que son las informales, están cerradas y, por lo tanto, no tenemos una entrada financiera para poder pagar nuestros aranceles y eso se ha traducido en que muchos estudiantes han tenido que congelar o derechamente desertar del sistema», sentenció la joven.
Por último, afirmó que el paro -por ahora- comenzaría el martes 1 de septiembre y sería indefinido. CHH