El principal detonante de la crisis en Convergencia Social fue la firma de Gabriel Boric en el llamado «Acuerdo para la Paz».
Apenas ocurrido el asunto, Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso, junto a otros militantes del partido, comunicaron su renuncia. Afirmaron que la razón para dejar Convergencia Social se debía a que no estaban a favor del acuerdo propuesto por parlamentarios, tanto oficialistas como de oposición, y que Boric, camarada de bando político, también había firmado.
Tras esto, el Tribunal Supremo de Convergencia Social anunció que la militancia del diputado Gabriel Boric sería suspendida, mientras durara la investigación en su contra.
Sin embargo, el conflicto continuó. A través de un comunicado, más de 112 personas confirmaron su renuncia al partido.
«El papel jugado por el diputado Boric en esta coyuntura manifiesta la imposición de una determinada línea política al interior del partido; línea que privilegia la vía institucional de manera casi exclusiva para intentar traducir los procesos sociales que implican gérmenes de transformaciones políticas», precisaron los ahora exmilitantes.
Asimismo, enfatizaron: «Nos unimos a Convergencia Social con la convicción de estar conformando un partido interesado en aliarse y trabajar con la actuación de compañeros que, bajo el pretexto de asumir supuestas responsabilidades de Estado, no han hecho otra cosa que ayudar a conservar un orden político de decadencia y desprestigio».
Por ello, recalcaron que la decisión tomada por Boric, sin la consideración de su partido, los «obligó a replantearse la pertenencia a esta casa común». CHH
[CARTA RENUNCIA A CONVERGENCIA SOCIAL] Junto a un amplio arco de militantes hemos tomado la desición colectiva de abandonar Convergencia Social.
No es una decisión fácil, pero en determinados momentos de la historia de los pueblos es necesario ser audaces. pic.twitter.com/5qcKStGR2y— Cristian Cuevas Zambrano (@ccuevasz) November 23, 2019