Este domingo, se efectuó la reconstitución de escena del crimen de Fernanda Maciel, en la que el único imputado, Felipe Rojas, reconoció su autoría de la violación y asesinato de la joven.
El crimen ocurrió en febrero de 2018 – en la comuna de Conchalí-, cuando Maciel tenía 21 años y se encontraba embarazada de siete meses. Sus restos fueron hallados en junio del año pasado en una bodega cercana a su casa.
Durante la reconstitución de los hechos, se registraron manifestaciones de agrupaciones feministas que exigieron justicia por la joven embarazada que fue asesinada.
El abogado de la familia, Pedro Díaz, manifestó que «Felipe Rojas declaró lo que hizo, al interior de la bodega, con Fernanda. Efectivamente dio el relato de los hechos, por lo que hizo una confesión».
«Primero comete el delito de violación (…) luego el tipo la asesina, tenemos antecedentes de que las amarras que se generan fueron estando viva y en definitiva la enterró viva. Eso dice el informe. Es crudo. Por lo tanto tenemos que buscar la configuración de los delitos, pero sí o sí aquí hay perpetuo calificado», sostuvo Díaz.
En tanto, Valentina Maciel, hermana de la víctima, pidió justicia y subrayó que la mayoría de los hechos expuestos durante esta jornada ya eran conocidos y que habían sido señalados en un informe previo.
“Queremos justicia, que las mujeres dejemos de ser víctimas de violación, de maltrato. Que la fiscalía por una vez haga bien su trabajo. No por ser personas de escasos recursos van a dejar de investigar, dejar que las policías hagan mal su trabajo”, apuntó.
“Tuvo que pasar más de un año para que cavaran en esa bodega. Tuvimos que callarnos por orden de la fiscal. No necesitábamos que él contara porque con las personas que trabajamos, con nosotros ya sabíamos”, agregó Maciel.
El caso está a cargo de la fiscal Patricia Varas, de la Fiscalía de la Región Metropolitana Centro Norte, quien pertenece a la sección de Delitos de Género y Violencia Intrafamiliar.
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CHH
