Cuando ya finaliza el mandato de la Presidenta Bachelet, un megaproyecto cae en la mesa del Palacio de Gobierno. Un consorcio Chino-Estadounidense propuso la construcción de un tren rápido, que uniría Santiago con Valparaíso en 45 minutos, es decir la mitad de lo que actualmente se demora cualquier persona en vehículo o bus.
El Consorcio TVS lo componen la multinacional de transportes China Railways Gruoup Limited (CREC), el grupo Sigdo Koppers y Latinoamérica Infraestructura y la inversión se estima será de US$1.600 millones.
El monto sería financiado directamente por los privados que están a cargo de la propuesta y eso significa que no necesita un subsidio del Estado.
Según un comunicado emitido por el grupo, el objetivo del tren de alta velocidad es mejorar la calidad de vida de quienes habitan la zona central del país, siendo 8 millones de personas las beneficiadas según sus estimaciones. El proyecto contempla cuatro estaciones en su plano inicial, que serían Valparaíso (Barón), Viña del Mar (Plaza Viña del Mar), Casablanca y Santiago (Maipú). Estimaron que de la capital a Viña del Mar se tardaría solo 39 minutos el recorrido. A su vez se establece en la ficha que serán 127 kilómetros de recorrido.
Los trenes que se proponen para este proyecto tendrán capacidad para 890 pasajeros sentados y se detalló que los traslados podrían llegar a los 220 kilómetros por hora en algunos puntos. Se estima que la frecuencia de trenes será cada 10 o 5 minutos dependiendo de la demanda de pasajeros y
En torno a los 4 años se demorarían en construir todo lo necesario para que el tren pueda operar de forma correcta y destacaron desde el Consorcio que la congestión y contaminación también serán disminuidas de manera considerable al estar funcionando este nuevo medio de transporte. CHH
