Carabineros de San Fernando detuvo durante la madrugada del domingo 3 de marzo al párroco Jorge Vásquez, quien era parte de la parroquia Santa Rita de Casia en la mencionada ciudad. El religioso manejaba en estado de ebriedad, por lo que fue conducido por personal policial hasta la comisaría.
Según comentó el capitán de la Primera Comisaría de San Fernando, Wladimir Fuentes, a Cooperativa, los oficiales vieron a «dos vehículos que venían en movimiento por calle Manso de Velasco hacia el oriente, instancia en que el primer móvil se detiene en el semáforo que está en calle O’Higgins, cuando en forma sorresiva es chocado por la posterior por el segundo vehículo que es el conductor que iba en estado de ebriedad».
El oficial agregó que «el implicado marcó 2,03, lo que es catalogado como conducir en estado de ebriedad». Por lo anterior, el párroco fue detenido, y según instruyó el fiscal a cargo, fue dejado en libertad en conformidad del artículo 26, es decir, a la espera de ser citado por el tribunal competente.
A raíz de esta situación, la Diócesis de Rancagua indicó en un comunicado que «el P. Jorge Vásquez ha sido apartado del ejercicio público del ministerio sacerdotal y, por ende, del oficio de párroco para que responda ante la justicia frente al accidente vehicular que protagonizó». «El Obispado de Rancagua está preparando los actos administrativos correspondientes», señala el escrito.
Mientras Vásquez se encuentra en este proceso, el diácono Juan Bastías asumió como el administrador parroquial de Santa Rita de Casia. CHH