Durante los últimos días, el Congreso aprobó una inédita reforma al sistema de pensiones en el país, lo que repercute directamente en la población trabajadora, empleadores y actuales pensionados.
Pese a que debe ser analizada y revisada por el Tribunal Constitucional, esta debería entrar en vigencia el próximo marzo, avanzando de forma gradual hacia su total implementación.
Con respecto a esta nueva legislación aprobada por la cámara baja y que esperó más de 40 años para adaptar modificaciones, el diputado del distrito 8 y militante del Partido Republicano, Agustín Romero, conversó con Chicureo Hoy sobre la implicancia de estas medidas.
En primera instancia, el legislador comenta que: “Es una reforma que Chile necesitaba para que se mejoren las pensiones de los adultos mayores y aquellos que reciben pensiones muy bajas y miserables. Sin embargo, esta contiene muchos problemas, los que finalmente se traducen en una injusticia brutal hacia los mismos trabajadores”.
Diputado Romero: «Nos hubiera gustado ser parte de una reforma de pensiones que permitiera, realmente, solucionar este problema y cerrarlo»
Tomando en cuenta el punto anterior, el diputado Romero detalla los puntos que fundaron el rechazo republicano hacia estas medidas: “Nosotros no estamos de acuerdo con el componente del reparto, lo que se traduce en un préstamo que los trabajadores proporcionan al Estado para financiar la política pública, a los mismos que tienen que contribuir con los impuestos generales a su Nación, recibiendo menos (sueldo) líquido y que se les cargue la mano con medidas que debería financiar el Estado”.
Consultado respecto si la bancada republicana hubiera votado de manera distinta, Romero detalla que: “Lo que se hizo fue validar un acuerdo, no una reforma de pensiones. Nos hubiera gustado ser parte de una reforma de pensiones que permitiera, realmente, solucionar este problema y cerrarlo, pero lo que estamos viendo es que la izquierda no está interesada en cerrar este problema”.
Voté en favor de la gente que se saca la cresta… Y que cotiza y ahora tendrán que prestarle dinero al Estado. No a quitarle el dinero a los trabajadores No a poner en riesgo sus empleos. No a hipotecar el futuro de nuestro país por un proyecto que no es sustentable. Porque…
— Agustín Romero Diputado👍🇨🇱 (@agustinromerole) January 31, 2025
Con respecto a la relación y que se mantiene con la centro-derecha, luego de que militantes de Chile Vamos otorgaran los votos para aprobar la cuestionada reforma, el diputado Romero menciona que: “Me sentí como cuando Chile Vamos, junto al partido Comunista (PC) y la izquierda se unieron para abrir el primer proceso constitucional; Nosotros votamos rechazo y Chile dijo no al proyecto octubrista. Chile Vamos no respondió a sus votantes y se puso de lado de la izquierda. Eso es muy lamentable. Para nosotros, esta fue la gota que rebalsó el vaso y que demuestra que nuestros proyectos políticos son distintos, ellos creen en una sociedad distinta; que entrega a los Carabineros, la Constitución, creen en una sociedad que es blanda con los delincuentes y se sientan con la misma izquierda que hoy está improvisando en materia electoral con los acuerdos políticos”.
Finalmente, el diputado del Distrito 8 y militante del partido Republicano, Agustín Romero, se refirió a los tiempos de discusión alrededor de la ya aprobada reforma a las pensiones, comentando a Chicureo Hoy que: “Como el acuerdo entre el Gobierno y Chile Vamos es malo y es débil, había que discutirlo rápido, porque cuando tienes acuerdos buenos y fuertes, el tiempo de discusión lo fortalece, pero en esta ocasión se aprobó entre gallos y medianoche.
“El día de la votación recibimos un archivo de más de 800 páginas durante la madrugada, es decir, es un acuerdo que adolece de falta de legitimidad brutal y tremenda. Lo que se hizo fue obligarnos a votar algo sobre lo que no había suficiente estudio; todas las discusiones en el senado se hicieron los fines de semana, el presidente de la comisión de Hacienda, el señor Kast, dijo que tenía dudas al respecto y al día siguiente dijo “ya no tengo ninguna duda” por arte de magia».
En conclusión, Romero refuta que ”aquí se validó un acuerdo. Si llaman a cualquier diputado al azar y le pregunta por ciertos detalles, no le sabrá responder porque no se leyó las 822 páginas del documento”.