La Sala de la Cámara de Diputados rechazó el proyecto de ley de Educación Sexual Integral, que pretendía establecer bases generales para la educación sobre sexualidad y afectividad de niños, niñas y adolescentes (NNA) en los establecimientos educacionales.
La iniciativa obtuvo 73 votos a favor, 67 en contra y dos abstenciones, sin embargo, no alcanzó el quórum requerido de 89 votos a favor. El proyecto quedó archivado y no continuará con su trámite legislativo, pese que había sido aprobado en la Comisión de Educación de la Cámara Baja en marzo de este año.
Uno de los puntos que causó controversia en la discusión fue la iniciativa de que la educación sobre afectividad, sexualidad y género fuera impartida desde la educación parvularia.
El diputado Sebastián Álvarez (Evópoli) tildó el proyecto de «antiliberal» y como una «propuesta totalitaria», ya que pretendía aplicar esta ley en centros educacionales «en consonancia con ideas progresistas, como el fomento del respeto por la diversidad y la no discriminación, especialmente basada en el sexo, orientación sexual, identidad y expresión de género, o del desarrollo de una sexualidad libre, o en el simple reconocimiento del género, que incluso se incorporó en título del proyecto», indicó.
Por su parte, la impulsora de la iniciativa, la diputada Camila Rojas del Partido Comunes, lamentó el hecho y argumentó la importancia de esta materia debido a que “lo dicen los organismos internacionales. La educación en sexualidad, afectividad y género es fundamental para los niños y niñas”. Sin embargo, aseguró que insistirá en este tema con otros proyectos de ley. CHH