En el golfo Pérsico existe un mundo competitivo de las carreras de camello y sus bellezas. El equipo científico en Dubái declaró que hay clonaciones del «animal perfecto».
Las nueva tecnologías que abarca el territorio, permite reemplazar un camello por otro idéntico mejorando alguna de sus morfologías como el cuello y labios caídos.
En el Centro de Reproducción Biotecnológica de Dubái, los científicos trabajan con microscopios para desarrollar un nuevo camello pero con aspectos más delicados. «Tenemos tantos pedidos que no podemos mantener el ritmo», declara a AFP Saud Al-Otaibi, el doctor Nisar Wani, director científico del centro. Según señala, existen muchas clonaciones que ya se encuentran en el sector.
Los barcos del desierto, como fueron apodado los camellos por los árabes, eran utilizados para transportar mercancía de una zona a otra. Como reporta Nisar Wani, sus colaboradores trabajan día y noche para realizar copias y mejorar la apariencia de estos animales.
¿Cómo es el proceso de clonación?
El procedimiento se desempeña recuperando el ADN de las células del animal «insuperable» y las insertan en los óvulos de las camellas preñadas. Sin embargo, ante la gran demanda los científicos quieren probar la técnica de ovulación múltiple.
«Recogemos los embriones de estas hembras después de siete u ocho días y los introducimos en madres sustitutas ordinarias. En vez de producir un bebé una vez al año, podemos producir muchos», confirma el científico Wani.
En el año 2009, nació el primer camello clonado del mundo. En la actualidad, los clientes están dispuestos a cancelar fortunas entre 200.000 y 400.000 dirhams (55.000-110.000 dólares), para obtener la mejor réplica genética.
Wani asegura que las clonaciones se realizan para reproducir animales más rápidos en las carreras o para generar mayor leche, generando 35 litros diarios, siete veces más que la que produce un camello natural. La leche en Dubái es consumida como la de vaca en Chile y se encuentra en todos los centros comerciales. CHH