Foto: EFE/NIH
Este lunes, Estados Unidos inició las pruebas en humanos de una vacuna contra el coronavirus, mientras que las autoridades norteamericanas anunciaban de que el país llegó al “punto de inflexión” de una crisis que podría durar “hasta agosto”.
En esa línea, Nueva York junto a cuatro estados más decretaron medidas estrictas para restringir el movimiento de sus ciudadanos ante el crecimiento exponencial del número de casos, que de acuerdo a las cifras oficiales aumentó a 3.487 en todo Estados Unidos, con por lo menos 68 fallecimientos relacionados con la enfermedad.
Dada esta situación, en un centro de investigación en Seattle (Washington, noreste), las autoridades mandatarias del país, testearon este lunes por primera vez en un humano la vacuna conocida como RNA-1273, creada esencialmente para frenar el brote del coronavirus.
«La fase 1 de la prueba clínica para evaluar una vacuna en investigación diseñada frente a la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) ha empezado», dieron a conocer en un comunicado los Institutos Nacionales de Salud (NIH, en inglés) de EE.UU.
La vacuna se probará en esta primera fase a un total de 45 voluntarios, todos ellos adultos sanos de entre 18 y 55 años de edad, que participarán durante seis semanas en el experimento, cuya misión es evaluar diferentes dosis del producto para comprobar su seguridad.
De acuerdo al Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas de EE.UU. (NIAID), que forma parte de los NIH y ha creado la vacuna junto a la compañía de biotecnología Moderna, el proyecto de inoculación frente al coronavirus ha tenido resultados alentadores en modelos animales.
A pesar de que el estudio ha avanzado a una «velocidad récord», según el director del NIAID, Anthony Fauci, ese mismo trabajador comentó la semana pasada que no espera que haya una vacuna disponible para el uso público hasta dentro de 12 ó 18 meses.
Distintos laboratorios en todo el mundo están tratando de desarrollar una vacuna contra el nuevo coronavirus, utilizando distintos enfoques. En el caso de la inoculación probada por el NIAID, se ha desarrollado debido a estudios previos sobre los coronavirus que ocasionaron las epidemias de SARS y MERS. CHH
