El suicidio de Marco Antonio Velásquez alertó al Ejército. Luego de que el conscripto asesinara a algunos de sus compañeros y se quitase la vida, la institución decidió tomar medidas al respecto.
Una investigación exhaustiva y modificar los reglamentos internos relacionados al ingreso de jóvenes al servicio militar, fueron algunas de las iniciativas establecidas por el Ejército.
Asimismo, la institución les realizó exámenes psicológicos a sus 9.219 conscriptos. Los resultados especificaron que 1.537 de ellos “no son recomendables” para las funciones que desempeñan. Las cifras equivaldrían a un 16,67% del total de soldados.
Tras esto, el Ejército decidió desvincular a todos los conscriptos que no fueron bien evaluados psicológicamente. CHH