Este viernes, y a través de las redes sociales, el grupo terrorista Estado Islámico se atribuyó el atentado que provocó 29 heridos en el metro de Londres. «El atentado con una bomba en el metro de Londres fue llevado a cabo por (…) el Estado Islámico» indicó Amaq, el órgano de propaganda del grupo yihadista.
El gobierno británico continúa en la búsqueda del terrorista que dejó el balde de pintura en el vagón del tren subterráneo que se encontraba en la estación Parsons Green.
Reacciones en Londres
El gobierno británico elevó a su nivel más alto el grado de amenaza terrorista mientras trata de capturar al autor del atentado contra el metro de Londres que dejó este viernes 29 heridos leves.
«La gente verá más policía armada en el transporte público y en nuestras calles, brindando protección adicional», explicó la primera ministra Theresa May tras el atentado contra un tren en la estación de Parsons Green reivindicado por la organización Estado Islámico.
«Es una medida proporcional y sensata» que supondrá que el ejército asuma tareas policiales antes de las grandes aglomeraciones del fin de semana en torno a acontecimientos deportivos, dijo May.
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, dijo a la radio LBC que estaba en marcha «una caza» para hallar al o a los autores del atentado.
Según Sky, la policía privilegia la hipótesis de un artefacto que no estalló completamente, pero cuyo fogonazo habría bastado para herir a los pasajeros.
Un cubo con cables
Según una periodista de Metro.co.uk que estaba en el lugar, hay gente que resultó «muy quemada» y había perdido el pelo.
En vídeos y fotos publicadas por testigos en las redes sociales se podía ver un cubo de plástico acabando de arder. El cubo, como los que se usan para la pintura, estaba dentro de una bolsa de plástico y de él salían unos cables, pero el conjunto no parecía muy dañado.
Ello «sugiere que ‘la explosión’ se produjo sólo en parte», dijo Hans Michels, profesor de ingeniería química del Imperial College de Londres.
«Quizás la mezcla no tuvo la composición correcta o el sistema de ignición era inadecuado o estaba mal colocado», añadió.
La estación de Parsons Green está en el sudoeste de Londres, en el barrio de Fulham, una zona de clase media-alta.
Los testigos narraron a la AFP como un fogonazo recorrió el tren con la explosión, tras la cual se produjo una estampida.