Francia anunció que implementará un toque de queda a las 20.00 horas para año nuevo, el 31 de diciembre, ante el aumento de casos de Covid-19 en el país.
Esto, a pesar de que el país decidió levantar el confinamiento el 15 de diciembre, según indicó el primer ministro Jean Castex, quien señaló que aunque la situación ha mejorado, la baja de casos «se ha ralentizado en los últimos días».
En esa línea, afirmó que «estamos en una especie de meseta», por lo que señaló que si los números no mejoran, podría haber un tercer confinamiento en el próximo tiempo.
«Tendremos que respetar la regla del toque de queda, quedarse en casa el 31 de diciembre», afirmó el primer ministro.
Por su parte, el presidente Emmanuel Macron explicó que «estamos todos tomando las decisiones necesarias para proteger Navidad y las fiestas familiares, para evitar un rebrote de la epidemia». CHH