Durante este lunes, el Gobernador de Santiago, Claudio Orrego, junto a los alcaldes de Lo Prado, La Cisterna, Quilicura, Conchalí y Pedro Aguirre Cerda, se reunieron con el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, para tratar de incluir a estas comunas en el Plan Calles sin Violencia.
Por su parte, Orrego comentó que “basado en la comparación de tasas de homicidio proporcionalmente entre distintas comunas, estas comunas aparecen de las más violentas de la Región Metropolitana”.
Además, indicó que “el aumento de los delitos violentos como encerronas o robos también posicionan a estas comunas entre las más afectadas. Santiago es una ciudad intercomunal y la verdad es que el crimen organizado no reconoce límites entre las comunas”.
En tanto, René de la Vega, alcalde de Conchalí, destacó lo importante que sería pertenecer a este plan: “Conchalí tiene una baja del 70% de carabineros, lo que se traduce a que no tiene como cubrir las mínimas necesidades”. CHH