Aproximadamente 90 horas permaneció el ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Mauricio Rojas, en el cargo. Esto luego de haber sido elegido por el Presidente Sebastián Piñera el pasado jueves 9 de agosto, tras la salida de la ministra Cecilia Pérez.
El mandatario aceptó la renuncia, y ante la prensa afirmó que «nuestro Gobierno condena categóricamente los atropellos a los DD.HH. en cualquier tiempo, en cualquier lugar y en cualquier circunstancia».
En la misma línea, señaló que «con respecto a la situación del ministro Mauricio Rojas, por sus declaraciones efectuadas algunos años atrás. Queremos ser firmes y claros: no compartimos sus opiniones y declaraciones respecto al sentido y la misión del Museo de la Memoria. Tampoco compartimos la intención de ciertos sectores de nuestro país que pretenden imponer una verdad única».
No obstante, indicó que «como presidente de Chile y pensando en el interés de nuestro país, y pensando en todos los compatriotas, he decidido aceptar su renuncia».
Rojas será reemplazado por Consuelo Valdés, arqueóloga de profesión quien se desempeñaba como directora ejecutiva en el Museo Interactivo Mirador (MIM).
Toda esta situación se relaciona con antiguos dichos de Rojas sobre el Museo de la Memoria. Así, en el año 2015 indicó que “más que un museo (…) se trata de un montaje cuyo propósito, que sin duda logra, es impactar al espectador, dejarlo atónico, impedirle razonar (…) Es un uso desvergonzado y mentiroso de una tragedia nacional que a tantos nos tocó tan dura y directamente”.
Esto generó una amplia polémica en varios sectores de la sociedad, entre ellos grupos de actores, músicos y artistas que convocaron a una manifestación para este miércoles 15 de agosto. CHH