Felipe Rojas, imputado por el asesinato de la joven embarazada Fernanda Maciel, intentó quitarse la vida a través de un ahorcamiento. Además, inició una huelga de hambre líquida acusando que ha recibido malos tratos y hostigamiento por parte personal de Gendarmería.
Según informó el programa Hola Chile, un informe del Poder Judicial indica que Rojas, quien confesó el crimen, intentó quitarse la vida el pasado 31 de diciembre. El documento señala que el sujeto se negó a afeitarse, aludiendo a que tenía una infección cutánea, por lo que luego «procede a amenazar a funcionarios de Gendarmería de Chile», detalla el informe.
«Atendido lo ocurrido, Gendarmería adopta procedimiento de rigor y (Rojas) es trasladado al piso 4, celdas de aislamiento. Siendo las 17.30 horas aproximadamente, el interno se niega a salir a cuenta de internos e intenta suicidarse rompiendo frazadas y simula ahorcamiento», agrega el documento.
Debido a esto, Rojas fue trasladado al Hospital Horwitz, donde se determinó que no es necesaria ayuda psiquiátrica, por lo que volvió a ser trasladado al centro penitenciario. En el lugar, escribió una carta informando que realizará una huelga de hambre líquida debido a que ha recibido malos tratos y hostigamientos por parte de Gendarmería. «¡Basta de torturas en la cárcel!», escribió Rojas.
En tanto, desde la institución señalaron que «se dio cuenta al tribunal respectivo, iniciándose una investigación interna respecto a la denuncia del imputado en contra del personal penitenciario”. CHH
