El humo se podía ver desde distintos puntos del sector norte. Las llamas no eran muy altas pero la superficie de pastizal quemado iba cada vez agrandándose más. De hecho en uno de los momentos de mayor tensión para unos vecinos del sector de Santa Catalina en Lampa, las llamas llegaron hasta los muros de concreto que separaban el predio con el patio de una casa.
Lo que se quemaba era un terreno con malezas y pastizal en su mayoría, pero el viento cambió de dirección y el fuego comenzó a acercarse al sector rural de La Vilana, donde había algunas casas de material ligero y animales que se veían en medio del espeso humo.
Para controlar la emergencia llegaron 40 brigadistas de la CONAF, el Cuerpo de Bomberos Colina-Lampa y la colaboración de otros voluntarios del sector norte. En el aire había dos helicópteros dromedarios que lanzaron agua en cerca de 7 ocasiones para apoyar el trabajo de tierra.
El 2° comandante del Cuerpo de Bomberos Colina-Lampa señaló a Chicureo Hoy «tenemos peligro de propagación hacia el norte, al sector de La Vilana, es nuestra mayor preocupación. Nos ha costado mucho llegar con los carros, es un lugar con nulo acceso para las máquinas, entonces estamos realizando mayor trabajo de infantería. Este pasto es muy complicado, porque se ve poca llama, pero avanza mucho y tira mucho humo. En este caso lo peligroso es que el viento aumenta a esta hora y el peligro es que el fuego salte los cortafuegos naturales que hay y llegue a las casas» sentenció, para luego subir a su auto e ir al lugar más complejo de la emergencia.
Luego de 3 horas y media de trabajos, la segunda alarma de incendio se dio por superada, el fuego se acabó y volvió la calma para las familias que veían como el incendio avanzaba en algunos minutos sin control.