Ipsos lanzó su último informe “Felicidad Global 2023”, con el objetivo de medir la proporción de personas que se consideran felices y conocer cuáles son consideradas las fuentes de felicidad que entregan mayor satisfacción.
Según la encuesta, un 79% de los chilenos se declara una persona “muy feliz” o “bastante feliz”, estando por encima del promedio mundial (73%) y ubicándose como el cuarto país americano con el porcentaje más alto, sólo superado por Brasil (83%), México (81%) y Colombia (80%).
Además, el nivel de felicidad en Chile se recupera después de dos años con mediciones inferiores: mientras que en 2020 sólo un 39% de las personas se consideró feliz, a fines de 2021 esto aumentó a 53%. Hoy son ocho de cada diez chilenos los que se consideran felices.
“Chile se suma a la tendencia general de los países de Latinoamérica, donde se observa una mejora importante del nivel de felicidad declarada tras la pandemia. Nuestros países se vieron muy fuertemente golpeados en el estado de ánimo tras los encierros, y poco a poco se recuperan los indicadores que se veían antes del 2020”, explica Miguel Pinto, Subdirector de Estudios Públicos de Ipsos Chile.
Asimismo, el experto precisó que “tanto en Chile como en el mundo podemos ver mucha inestabilidad en la autopercepción de felicidad, esto se expresa en cambios bruscos entre las distintas mediciones, lo que es también un indicador de cómo los estados de ánimos van cambiando rápidamente con los escenarios tan inciertos en los que vivimos”.
A nivel nacional, los aspectos de la vida donde las personas se sienten más satisfechas son los estudios (85%), el sentimiento de “sentirse querido” (83%) y los hijos junto a la relación con la pareja o cónyuge, ambos con un 82%. Por otro lado, los temas donde los encuestados chilenos se declaran menos satisfechos son la situación social y política del país (26%) y la situación económica del país (26%).
“En un mundo que vive atravesado paralelamente por distintas crisis, la estabilidad en la salud mental pasa a ser clave para el bienestar de las personas. Eso reafirma la necesidad de que los Gobiernos se ocupen de la salud mental como un pilar de la protección de las personas, que han visto reducido su red de apoyo y donde las interacciones virtuales van reemplazando al contacto personal”, detalla Miguel Pinto.
A nivel global, un 72% de los encuestados aseguró contar con uno o varios amigos cercanos o familiares con los que podría confiar para que les ayuden en caso de necesidad. En este ámbito, nuestro país se ubica apenas por encima del promedio global, con 73% de los chilenos diciendo que cuentan con una red de apoyo. CHH