Durante la jornada de este martes 2 de febrero, y luego de la polémica suscitada por la llegada de Avifavir -el medicamento ruso que importó el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, y que supuestamente ayudaría a combatir los efectos del Covid-19- el Instituto de Salud Pública (ISP) aseguró que fármaco se encuentra aún en prueba en Chile y el mundo.
Por medio de un comunicado publicado en su página web, la entidad explicó que «en el mes de agosto del año 2020 autorizó la importación de 250.000 comprimidos del medicamento Avifavir (2.500 tratamientos aproximadamente) para uso experimental».
Según indicaron, «el ISP respondió a la solicitud cursada por la Asociación Chilena de Municipalidades con Farmacia Popular (ACHIFARP)», la que, detallaron, «establece que el producto se utilizará en el Servicio de Atención Primaria de Urgencia de Alta Resolutividad de la Comuna de Recoleta, bajo la responsabilidad de su Director Médico, quien debe realizar el seguimiento de los pacientes y reportar al ISP las sospechas de reacciones adversas al uso de este medicamento».
Heriberto García director (s) del ISP, afirmó al respecto que “el uso de este medicamento es controlado, es decir, sólo se puede utilizar de manera clínica en el Servicio de Atención Primaria de Urgencia de Alta Resolutividad de la comuna de Recoleta, no se vende en farmacias», y agregó que «el ISP lo autorizó excepcionalmente y estará fiscalizando el buen uso, así como también, una posible publicidad indebida”.
Asimismo, se destacó que «este medicamento no puede ser usado en mujeres embarazadas, porque puede producir Teratogénesis y tampoco puede ser usado en pacientes con riesgos de producir la enfermedad de la Gota por la producción de ácido úrico».
En tanto, en relación a la diferencia entre el medicamento y el uso de las vacunas, García enfatizó en que «este medicamento no reemplaza a las vacunas, ya que éstas son preventivas para la población, y en caso que una persona contraiga el COVID-19, la inmunización evita casos graves y reduce las hospitalizaciones».
Sumado a lo anterior, indicó que el remedio «está en periodo de prueba todavía en el mundo y en Chile está autorizado para uso excepcional de manera clínica en personas que ya contrajeron el Covid-19».
Igualmente, informaron que el ISP puede suspender la distribución del fármaco si observa una «inadecuada administración», o reacciones adversas serias, como por ejemplo una hospitalización. CHH