Tras 30 años de interrupción, Japón retomó este lunes, de manera oficial, la caza comercial de ballenas en aguas territoriales y en su zona económica exclusiva.
Al respecto, un responsable del Ministerio de Agricultura, Bosques y Pesca afirmó a AFP que “consideramos que las ballenas son recursos marinos como los peces y que pueden utilizarse siguiendo criterios científicos”.
En tanto, la Agencia de Pesca de Japón anunció que las cuotas de captura para los próximos seis meses será de 227 ballenas (52 Minke, 150 Bryde y 25 Sei).
Cabe destacar que la caza comercial de ballenas fue prohibida bajo una suspensión de 1986 emitida por la Comisión Ballenera Internacional, institución que Japón abandonó en diciembre de 2018.
Por su parte, las autoridades japonesas han argumentado que el consumo de carne de ballena forma parte de su cultura y no pone en peligro a la mayoría de las especie.
Según señalan cifras citadas por El País, unas 300 personas trabajan directamente en la caza y provisión anual de carne de ballena (unas 5.000 toneladas), lo que supone una ingesta de 40 o 50 gramos por japonés al año. CHH