La NASA, en colaboración con la Agencia Espacial Europea (ESA) ha trabajado durante 8 años para llevar a cabo la primera misión interplanetaria para desviar el curso de un asteroide, lo cual se logró este miércoles con el despegue de la primera nave del sistema de defensa planetaria.
Se trata de la nave DART (por las siglas Prueba de Doble Redirección de Asteroide), la cual fue lanzada con éxito en un cohete SpaceX Falcon 9 desde la Base Espacial Vandenberg, en California, EE.UU. Su misión será impactar con el asteroide llamado Dimorphos, con la finalidad de medir cuánto puede alterar su trayectoria y velocidad.
Este objeto de 163 metros de diámetro orbita el asteroide Didymos, de 780 metros. De acuerdo a los cálculos de la NASA, DART impactaría Dimorphos en octubre de 2022, ya que ambos objetos se encuentran a aproximadamente 11 millones de kilómetros de la Tierra.
Kelly Fast, de la oficina de coordinación de defensa planetaria de la NASA, explicó que «DART solo cambiará el período de la órbita de Dimorphos en una pequeña cantidad. Y realmente eso es todo lo que se necesita en caso de que se descubra un asteroide con mucha anticipación».
Si bien este asteroide no representa un peligro para nuestro planeta, este será el primer intento para poner a prueba el sistema de defensa planetaria y así aprender a proteger la Tierra de posibles amenazas futuras, ya que el impacto de un objeto generaría una gran destrucción, devastando ciudades enteras y causando miles de muertos.
En tanto, la NASA explicó que «no se conoce ningún asteroide que represente un riesgo de impacto en la Tierra en los próximos 100 años», sin embargo, aseguran que este tipo de misiones «nos ayudarán a prepararnos mejor en caso de que un asteroide sea descubierto como una amenaza». CHH