A un mes de que entrara en vigor la Ley Karin, que busca crear entornos seguros de trabajo y sanciona el acoso laboral, han comenzado a aparecer los primeros balances, entre ellos, uno entregado por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS).
Según detalló la entidad, en el periodo se recibieron 2.233 denuncias de trabajadores, quienes acudieron principalmente para solicitar apoyo psicológico ante eventuales casos de acoso laboral. Del total de denuncias, el 64% corresponden a violencia laboral directa, mientras que el 36% a acoso sexual, violencia física y discriminación.
Guillermo Lermanda, jefe de Salud Ocupacional de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), relató a Radio Biobío que había trabajadores “que tenían tiempo esperando para denunciar” y que “hemos tenido a personas que llegan contando situaciones de acoso que se venían arrastrando hace dos, tres, años”.
En ese sentido, Lermanda destacó que “las empresas sí están respondiendo”. “Lo que hemos visto es que se está logrando generar un cambio en la actitud de las personas, en cómo relacionarse con los demás en el trabajo”, añadió.
Por otra parte, el funcionario de la ACHS sostuvo que la mayor cantidad de denuncias sobre Ley Karin provienen de “los rubros de los servicios, en la relación, por ejemplo, de personas de educación con sus pares de trabajo, y también con sus alumnos”.
“Educación, salud y servicios gubernamentales varios son donde hemos visto, hasta ahora, más frecuentemente estas denuncias”, agregó. CHH