Catalina Álvarez (16) volvía de una fiesta cuando se subió a un colectivo y contactó por última vez a su madre. Le aseguró que ya iba camino a casa. Luego de algunas horas, y al percatarse que su hija no regresaba, Ximena Godoy intentó comunicarse con ella. «Ay, mamita», es lo único que Ximena logró escuchar antes de que el celular fuera apagado.
Tras la desaparición de Catalina, la Policía de Investigaciones detuvo a Hugo Pastén (42), hombre dedicado a la locomoción colectiva y que estaría involucrado con lo ocurrido con la adolescente, además con otros casos.
Luego de ser interrogado por personal de la PDI, Pastén asumió ser el autor del asesinato de tres mujeres en Copiapó. Entre ellas, la menor de edad. Según lo que declaró el imputado, los homicidios ocurrieron entre enero y junio de 2019. Sin embargo, pese a que Hugo Pastén asumió haber raptado a Catalina, afirmó que la joven falleció al saltar desde el auto en movimiento. Personal policial indicó que al preguntarle a Pastén dónde estaría el cuerpo de la adolescente, el imputado, quien estuvo durante 13 años en la cárcel por los crímenes de robo y violación, entregó pistas falsas.
«Ella soñaba con estudiar»
Ximena Godoy, tras enterarse de la confesión del sujeto, afirmó: «Mi hija era especial. Le gustaba pintar y dibujar (…) Él le cortó las alas. Ella soñaba con estudiar e ir a la universidad». Además, la madre de Catalina Álvarez comentó: «Yo sé que él no va a hablar. No vamos a encontrar a mi hija por su boca, sino por el trabajo que va a hacer la PDI u otros organismos. Pero él no va a hablar, porque su pena sería mucho más alta con lo que le hizo a mi hija».
«Es un hombre desquiciado con una mentalidad enferma (…) Con lo que yo vi, quizás este tipo a mi hija la quemó», agregó Ximena Godoy. CHH
