El ministro de Salud, Jaime Mañalich, se refirió a la solicitud que han hecho varios alcaldes para que se decrete cuarentena total en sus sectores, como medida para enfrentar el Covid-19.
En esa línea, el secretario de Estado defendió, en conversación con ADN Hoy, el modelo de cuarentenas focalizadas que ha implementado el Gobierno, argumentando que un confinamiento total podría traer consecuencias negativas al país.
“Cuando determinados alcaldes piden cuarentenas totales o generales en sus comunas, o en toda la ciudad o país, no saben el daño que producirán en la población. En las comunas que hay cuarentenas, los propios alcaldes han cambiado de opinión porque la gente sufre, pasa hambre, se produce violencia intrafamiliar. Por eso deben ser cuarentenas focalizadas y tienen que tener un principio y un fin, de acuerdo a la realidad epidemiológica”, afirmó el jefe de la cartera.
De esta forma, explicó que según los antecedentes que manejan, en los confinamientos focalizados “no se produce un rebrote, donde sí se produce en países con lockdown, en donde la idea de que nadie se contagie deja a la población vulnerable”.
Para ejemplificar lo anterior, el ministro Mañalich hizo referencia al “efecto contrario se ha producido en Singapur, Corea, China, donde ha habido cierre masivo, por ejemplo, en la ciudad de Wuhan y eso ha significado de que ha quedado una gran cantidad de población, 1.200 millones de personas, susceptibles de contagiarse. Se encuentran con esta desgracia de que todas las medidas que hicieron empiezan a minimizarse, porque la enfermedad rebrota“.
En este punto, la autoridad destacó que el objetivo del Gobierno es que “el número de contagios que tenemos en una comuna sea de tal forma que no genere una presión excesiva para el sistema de salud, para manejar bien como ha sido ahora“.
Finalmente, el secretario de Estado precisó que “el destino de esto es que toda la población se infecte. No hay forma de evitarlo a menos que exista una vacuna. Tenemos que administrar la pandemia, dentro de lo difícil que es, para lograr que no haya ningún momento que sí ha ocurrido en Nueva York, Italia o España, que el contagio es de tal magnitud que exige una demanda alta al sistema hospitalario que no puede sostener, y dejar morir a los que no tienen camas o por decisiones éticas, médicas…no queremos llegar a eso. Queremos administrar esta pandemia con esta estrategia, con una enorme inversión del gobierno central para lograr que la velocidad de contagios sea lo más lenta posible”. CHH