Este domingo, la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, sostuvo una entrevista con el programa Estado Nacional de 24 Horas, en donde se refirió a la delincuencia -y la percepción que tienen los chilenos de la misma- en el país.
En ese contexto, Martorell detalló que, actualmente, «en el caso de las encerronas, tenemos un 23% menos que el año pasado en esta misma fecha y la victimización en sí misma ha caído muchísimo, nosotros asumimos (el mandato) con un 28% en la Encuesta Enusc, la última indica que ya vamos en el 23.5%».
Asimismo, remarcó que «el 90% de las encerronas son en la Región Metropolitana», razón por la cual el Gobierno instaló cámaras y lectores de patentes los puntos del Gran Santiago en donde es más frecuente que sucedan estos delitos.
A pesar de que la delincuencia haya disminuido, la subsecretaria sostuvo que ha «aumentado la percepción de inseguridad» en la ciudadanía, lo que podría deberse a que, en el 90% de los robos con violencia o intimidación, se utilizan armas de fuego.
Por ello, la autoridad destacó que, desde el año 2008, se está discutiendo una nueva Ley de Armas, la que «propone un ADN balístico, donde yo soy responsable de mi arma y de sus municiones» y que la Policía de Investigaciones (PDI) también pueda fiscalizar su uso, facultad que, hoy en día, solo la puede ejercer Carabineros.
Finalmente, Martorell aclaró que «lo que ha traído la pandemia es que ha aumentado el crimen organizado» y que «el 90% de las bandas han incrementado la participación de niños, niñas y adolescentes, sobre todo en crimen organizado como lo son los portonazos». CHH