Facebook, Instagram, Snapchat, whatsapp y las famosas “stories” en cada red social: los límites de la privacidad con estos medios parece ser cada vez más difuso, y el celular, puede resultar incluso un diario de vida para cada persona.
Es por esto, por la información privada y valiosa que suele haber en los dispositivos electrónicos, que usualmente las compañías telefónicas y de electrónica permiten poner una clave secreta a los aparatos.
Un estudio de WOM recientemente reveló que el 79% de los chilenos escoge proteger su celular con algún tipo de clave, sea contraseña, huella, etc.
“XYZ: Tres generaciones conectadas” es el nombre de la investigación, según informó CNN Chile. Y pese al alto índice de códigos secretos en el celular, la mayoría de la gente revela su clave voluntariamente sus cercanos: un 53% aseguró que lo hacía. De ellos, un 61% le daba la clave a su familia, un 51% a su pareja y un 30% a los amigos.
El tema ha generado polémica entre expertos y en redes sociales. Muchos ven dar la clave del celular como un voto de confianza, pero para otras personas podría ser peligroso: ¿es compartir tu clave secreta una muestra de cariño y confianza o, más bien, de control?
Sociólogos dieron sus visiones al respecto. El docente de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Adolfo Ibáñez, Arturo Arriagada, aseguró en una entrevista con La Hora que “no existe desconfianza en compartir la contraseña porque se trata de grupos primarios, o sea, donde el usuario forjó su personalidad. Además, a diario surgen problemas que no se pueden solucionar solos, olvidar la clave es un claro ejemplo”.
Por el contrario, Dominique Karahanian, académica de la Universidad Mayor, asegura que la conducta no es normal: “Es fundamental mantener la individualidad, dar la clave es una forma mal entendida de intimidad, donde hay que compartir todo”, indicó. Asimismo, afirmó que “todo lo que está en redes sociales será mal interpretado. En la web no existe lenguaje no verbal, por lo que hasta las bromas de la oficina carecerán de contexto para tu pareja, quien no conoce las dinámicas internas”.
En tanto, Pablo Viollier en Twitter, analista de Políticas Públicas de la ONG Derechos Digitales discutió el tema señalando que, desde su punto de vista, “Compartir tus claves con tu pareja no es amor, es una conducta abusiva que se presta para el control, la falta de confianza y la violencia de género”.
En tu opinión, ¿es saber la clave de tu pareja una forma de control, una conducta abusiva, o es más bien un voto de confianza y cariño? CHH