Durante el balance de casos del Covid-19 en Chile realizado por el Ministerio de Salud esta mañana, el jefe de la cartera, Jaime Mañalich, puntualizó en algunos temas de acuerdo a la situación y al combate de la pandemia en el país.
En primer lugar, el ministro insistió en que ha habido un cambio en las definiciones de caso de Covid-19 en Chile, y explicó que «no llamamos caso solo a aquel que tiene síntomas y se le hizo un examen de PCR (…), sino que también notificamos todos los días a aquellos nuevos casos que hemos ido a buscar y que han sido positivos con este mismo examen, a pesar de no tener síntomas o tener muy pocos».
Dado lo anterior, la subsecretaria de Salud, Paula Daza, puntualizó, en la conferencia de prensa, que de los 1.373 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas, «1.317 fueron sintomáticos y 56 asintomáticos».
Mañalich valoró esta nueva estrategia de conteo y afirmó que «ha sido exitosa», agregando que «se ha transformado en un instrumento formidable para controlar esta pandemia y para aislar aquellos casos potencialmente infectantes, sean sintomáticos, o no».
Preocupación por el Gran Santiago
Junto con lo anterior, en su discurso, el ministro expresó que «nos preocupa enormemente que el 85% de los casos nuevos que hemos detectado corresponden a la ciudad de Santiago».
Sobre esto, indicó que «es interesante enfatizar en que si bien siempre se ha tenido la idea de que Chile entero iba a evolucionar en una tendencia a aumentar los casos y luego a caer, es evidente que esa curva que conocemos hasta ahora tiene una composición diferente de acuerdo a la comuna y a la región que se trate».
En ese sentido, comentó que las medidas de prevención del contagio no tienen los mismos efectos en todos los sectores del país. «Por ejemplo, la cuarentena en Arica permitió que el número de casos nuevos esté reduciéndose, pero en otras comunas, como ocurre en algunas de la Región Metropolitana, tenemos una tendencia al aumento», detalló.
Retorno a una «nueva normalidad»
En cuanto al retorno a las clases y el trabajo, el secretario de Estado señaló que «nos parece imprescindible entender que cuando hablamos de un retorno seguro y del control de la pandemia, estamos hablando de dos objetivos (retorno seguro y control de la pandemia) que no son contradictorios, tenemos que tener un retorno a la normalidad que garantice que los niños y la gente que vuelva al trabajo lo hagan con seguridad y con la mayor tranquilidad que podemos dar a través de la investigación, testeo, manejo de casos y asilamientos».
Consultado sobre este tema y sobre el retorno a la normalidad en las preguntas de la prensa, explicó que «creo que concentrarse en un solo criterio numérico para ver la vuelta a clases no es suficiente (…) un buen criterio podría ser, diferenciar comunas que tienen una mayor incidencia de casos que otras, porque es muy distinto retornar a una vida de normalidad en comunas donde tienen pocos casos, que son los que pueden llevar la infección a otra comuna donde hay una gran concentración de casos».
En tanto, añadió que «independiente que haya comunas en las que se produzca una caída de los nuevos casos, creo que sería prematuro tomar una normalidad. Insistimos en que este retorno a la normalidad tiene que tener criterios flexibles y selectivos, y de acuerdo a la realidad epidemiológica con que nos encontremos».
Café y empanadas
Por otra parte, Mañalich fue consultado sobre los dichos que han emitido las autoridades con respecto a las actividades que se pueden hacer en este nueva normalidad, como la frase «tomar un café» de la subsecretaria Daza o «tomar una cerveza o comer una empanada» del ministro.
Sobre esto, respondió que «lo que coma cada persona en esta cuarentena o la bebida que tome en realidad no es nuestra preocupación, y los decretos que emanamos cada día no hacen un listado de lo que se puede o no consumir en un local», sin embargo, afirmó que «lo que sí ponemos es que, en un lugar de reunión social, donde estamos preocupados de que no haya contagio, tiene que haber lavado de manos, tiene que haber un metro de distancia, no puede haber más de 4 personas juntas, etcétera».
En esa línea, enfatizó en que «esos son los principios básicos, y hacer burla porque se toma café o se come empanada creo que no ayuda a lo que creemos, y a que la gente entienda cómo deber ser su vida durante las restricciones, durante la cuarentena o cuando estas cuarentenas se están levantando».
A partir de esto, ejemplificó con el caso de Chillán, donde se levantó la cuarentena ante la disminución de casos: «En Chillán la gente puede, con las limitaciones que hemos establecido, ir a servirse lo que estime conveniente, y nosotros no somos quién para indicarle que es lo que deben, o no, consumir», acotó.
Sumar esfuerzos
Finalmente, con respecto a críticas que ha recibido desde la oposición por su gestión en la crisis sanitaria, el ministro Mañalich señaló que «entiendo el interés de dañar, pero este es el momento de sumar, por lo que tiene que producirse este entendimiento de que no es momento para mezquindades, sino de enfrentar con claridad un desafío histórico para nuestro país que va a marcar un antes y un después».
Asimismo, indicó que «si se sigue estando en una dinámica de no colaboración, al final los que pierden son todos los chilenos, entonces los llamamos a sumarse, a sumar esfuerzos, porque esta es una tarea de todos los chilenos». CHH