El enigma de dónde estaban los textos perdidos de Parra comenzó a esclarecerse. Los manuscritos escritos en los 90´aparecieron luego de una indagación judicial y familiar.
Hace algunos días, Cristóbal Tololo Ugarte, nieto del antipoeta, anunció ante los medios de comunicación la perdida de valiosos textos de su abuelo. Asimismo, indicó a la galerista Isabel Croxatto y al coleccionista César Soto como los responsables. Sin embargo, durante el proceso de indagación muchos apuntaron a Juan de Dios Parra, hijo menor de Nicanor, como quien vendió y “obsequió” el trabajo de su padre.
El abogado de la familia Parra, Luis Valentín Ferrada, aclaró para el diario La Tercera, que “hay un punto indiscutible: el que vendió no era el dueño”. Además, sostiene que él no tiene precisión de quién es específicamente el autor del robo y que las personas que aseguran que Juan de Dios es el responsable de lo ocurrido “solo se han excusado en él”.
A pesar de ello, Constanza Franz, quien ofreció tres cuadernos a Isabel Croxatto, argumentando, también, que habían sido un regalo de Juan de Dios Parra, entregó los manuscritos a la biblioteca del Campus Lo Contador de la Universidad Católica. Lo mismo hizo el coleccionista Carlos Cruz, quien aseguró que en el año 2008 compró los cuadernos a Juan de Dios. Carlos Soto también está involucrado en el tema. El coleccionista afirma que la familia Parra tiene total conocimiento de que él compró hace algún tiempo trabajo de Nicanor a su hijo menor. Incluso, asegura que la compra fue hecha con documentos bancarios.
Consultado por La Tercera, Juan de Dios se negó a referirse sobre el tema. Asegurando, a su vez, que él no “sustrajo” los textos de su padre y que, además, “no cree en la importancia personal y menos en las vacas sagradas”.
Hasta el momento se han recuperado 10 cuadernos, 4 bandejas y algunos manuscritos. CHH
