Foto: Ales Bialiatski
Este viernes 7 de octubre, se entregó el Premio Nobel de la Paz a dos organizaciones de derechos humanos, la rusa Memorial y la ucraniana Center for Civil Liberties, además del defensor de Bielorrusia, Ales Bialiatski.
Los galardonados fueron reconocidos por su “esfuerzo sobresaliente para documentar crímenes de guerra, abusos de los derechos humanos y abuso de poder”, en cada una de sus respectivas naciones.
“Durante muchos años han promovido el derecho a criticar el poder y proteger los derechos fundamentales de los ciudadanos”, puntualizó el Comité Noruego del Nobel.
Este premio es entregado a siete meses de la guerra iniciada por Rusia contra Ucrania, la cual comenzó con la ayuda de Bielorrusia.
En la instancia, se señaló que el Center for Civil Liberties de Ucrania se ha “comprometido en esfuerzos para identificar y documentar los crímenes de guerra rusos contra la población civil ucraniana”.
“En colaboración con socios internacionales, el centro está desempeñando un papel pionero con miras a hacer que los culpables rindan cuentas por sus crímenes”, indicó el comité.
Memorial de Rusia, que fue fundado en 1987, se convirtió en uno de los organismos de derechos humanos más destacados después de la caída de la Unión Soviética y ha trabajado para exponer los abusos de la era estalinista. Fue clausurada por los tribunales rusos el 2021.
Por su parte, el activista bielorruso Ales Bialiatski es el fundador de Viasna (Primavera), otra de las organizaciones de derechos humanos que se ha ocupado de documentar y protestar contra la tortura hacia los presos políticos.
Según el comité es uno de los iniciadores del movimiento democrático que surgió a mediados de la década de 1980 en Bielorrusia, «dedicó su vida a promover la democracia y el desarrollo pacífico en su país de origen«. CHH