Luego de llamar “terroristas” a los exiliados políticos, el diputado UDI Ignacio Urrutia fue increpado por Pamela Jiles. La diputada del Partido Humanista se levantó de su lugar y encaró al parlamentario durante la sesión.
El conflicto en la Cámara se produjo tras los dichos del diputado Urrutia, quien mientras se discutía la reparación económica para las víctimas de derechos humanos, afirmó: “No es primera vez que se entrega este beneficio, ya es como la décima vez que se entrega este regalito a gente que, más que exiliados, fueron más que nada terroristas”.
La bancada opositora reaccionó ante las palabras de Urrutia, asegurando que su comentario no era aceptable. “Afuera te espero, cobarde de mierda”, le dijo Jiles al diputado.
Tras el episodio, Urrutia señaló: “Estoy extremadamente adolorido de un brazo por el golpe que recibí de la diputada Jiles (…) Estoy sumamente complicado con la agresión que recibí de parte de la diputada Jiles en la Cámara de Diputados”.
Consultado por Chicureo Hoy sobre el tema, el diputado Gabriel Silber, afirmó: “Al margen de si uno es de derecha o izquierda las palabras dan clara incitación al odio por parte de un diputado tratando de terroristas a las víctimas de derechos humanos en nuestro país, son palabras que merecen el repudio transversal. Por eso me quedo, incluso, con las declaraciones del ministro Blumel que dice que esta es una frase cruel y que condena, también, las palabras de un diputado de Gobierno. En consecuencia, creo que el respeto a los derechos humanos es deber de todos los chilenos no importando el color político, así es que junto con lamentar lo que ocurrió hoy en el hemiciclo, también quiero poner en positivo la reacción transversal que han tenido los distintos sectores políticos de izquierda o derecha para condenar este tipo de declaraciones”.
Asimismo, Patricio Melero, diputado UDI que estuvo presente durante la discusión, señaló a Chicureo Hoy: “Las palabras del diputado Urrutia no fueron las más adecuadas y la reacción de la diputada Jiles fue peor. No corresponde a una Cámara política este nivel de enfrentamiento que tuvo su origen en un proyecto de ley enviado por el gobierno de la presidenta Bachelet cuatro días antes del término de su mandato y que tiene como objetivo entregarle un bono de $3 millones a personas que fueron víctimas de violaciones a los derechos humanos y que cuesta $90 mil millones de pesos y que no están contemplados en el presupuesto del año 2018 que dejó el Gobierno anterior. Entonces, hay también una provocación del Gobierno anterior que no tuvo el coraje, la valentía y la decisión de mandar el proyecto de ley durante 4 años y lo hace a última hora y le entrega la responsabilidad al gobierno del presidente Piñera sin tener ni arte ni parte en el tema”.
De igual manera, Pablo Vidal, diputado de Revolución Democrática, precisó a Chicureo Hoy que el diputado Urrutia “Hoy sobrepasó todos los límites. Fue una apología de la tortura y a la dictadura que hace el diputado Urrutia que en países desarrollados no solo está prohibida sino también penada por ley».
En este sentido, señaló que en Chile tenemos que avanzar, tenemos que establecer una Ley que condene este tipo de apologías y negacionismos a lo que en Chile ocurrió. En Chile no solo se negaron los derechos humanos, se destruyó la historia democrática de nuestro país y lo que él defendía fue eso, fue una provocación donde habla que las medidas de reparación que el Estado chileno ha tenido con las víctimas de los Derechos Humanos, él las llamo regalitos».
Con respecto a la reacción de la diputada Jiles, afirmó que «fue víctima de tortura en Dictadura por lo que no solo me parece natural y entendible, sino que también es parte del dolor de una herida que en Chile sigue abierta y que el diputado Urrutia no quiere comprender, hoy toda la derecha, o al menos en su gran mayoría ha salido a condenar los dichos del señor Urrutia porque no es comprensible que en democracia se digan cosas como las que se dijeron hoy en la Cámara, donde se supone quienes somos parte somos honorables y yo creo que él no lo es». CHH