Una investigación en conjunto de la Policía de Investigaciones (PDI) y la Fiscalía Metropolitana Oriente reveló que un grupo criminal, dedicado especialmente a delitos de drogas, se encontraba realizando un túnel para llegar a la bóveda de una sucursal de Prosegur, en la ciudad de Rancagua.
El objetivo era acceder mediante aquel paso a las dependencias de la empresa de seguridad y sustraer el dinero almacenado.
“En un trabajo coordinado con la unidad de la región se logró la detención de 10 ciudadanos chilenos, todos ellos con diversos antecedentes policiales”, comentó el subprefecto Juan Figueroa, jefe de la Brigada Antinarcóticos Metropolitana.
Los delincuentes se habían desplazado desde la Región Metropolitana hasta Rancagua para ejecutar la acción. De momento, se desconoce desde cuándo se encontraban cavando el túnel.
“A través de los peritajes efectuados, (se pudo establecer) que estaban muy próximos a lograr su objetivo”, añadió Figueroa.
Asimismo, según lo señalado por el subprefecto Cristián González, jefe de la Biro de Rancagua, la construcción tenía aproximadamente 15 metros de largo.
En el lugar fueron encontrados diversos equipos para la realización del túnel, el que contaba con iluminación y ventilación. En este sentido, González sostuvo que, dada la preparación de la obra, los individuos habrían contado con información privilegiada.
“Por lo pronto se logró evitar que un delito de esta magnitud se hubiera concretado aquí en Rancagua”, agregó.
Los detenidos pasaron a control de detención en esta jornada. CHH
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