La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a una banda familiar que arrendaba propiedades en la zona sur de la capital para cultivar de manera in door plantas de cannabis, droga que luego era vendida en Lo Espejo.
Los responsables, dos mujeres y cuatro hombres, miembros de un grupo familiar, que además poseen antecedentes policiales por delitos de homicidio, receptación, infracción a la ley de drogas y lesiones. La Fiscalía Metropolitana Sur ordenó prisión preventiva para los imputados.
En el operativo se incautaron 477 plantas en proceso de cultivo, más de 3 kilos de cannabis, armas de fuego y dos vehículos. El inspector Gonzalo Leiva de la Brigada Antinarcóticos Sur informó que lo que hace llamativo este procedimiento es que las casas, que eran arrendadas por el líder da la banda, “estaban acondicionadas con elementos técnicos que contaban con distintos tipos de medición, tanto como de temperatura, control de aire acondicionado y extracción”.
El fiscal Cristián Suárez Pérez aseguró que “el tribunal ha estimado la existencia de delitos de tráfico de drogas, como también de lavado de activos”, ya que los miembros tenían una empresa de delivery de agua purificada que utilizaban como fachada para disimilar las ganancias de la venta de droga. CHH
