El Presidente de la República Sebastián Piñera, esta tarde llamó la atención respecto de diversas materias que en el Congreso se están debatiendo, pese a conocerse su carácter inconstitucional.
El mandatario dio cuenta que “un pilar fundamental de nuestra República democrática y del Estado de Derecho es el respeto a la Constitución y las leyes. De hecho, al asumir sus cargos, tanto el Presidente, los Ministros de Estado, los Parlamentarios y los Jueces juran o prometen cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes”.
Ante esto, hizo ver que “en los últimos tiempos, han proliferado mociones de parlamentarios que se tramitan en el Congreso, que pudiendo estar bien inspiradas, son inconstitucionales porque no respetan las atribuciones que la Constitución otorga al Congreso Nacional, y que los parlamentarios juraron o prometieron cumplir”. Agregó que “algunos reconocen explícitamente la inconstitucionalidad de sus proyectos. Sin embargo, perseveran en ellos en virtud de la bondad de sus objetivos, como si el fin justificase los medios”.
En esa misma línea, recordó que “la Constitución y las leyes, y el respeto de las mismas, son elementos y condiciones esenciales para la existencia y buen funcionamiento de la democracia, la República y el Estado de Derecho”.
El jefe de Estado hizo un paralelo con el Derecho Internacional que protege a los países más débiles de los posibles abusos de los países más poderosos, “la Constitución y las leyes dan estabilidad y certeza y protegen a todas las personas, y especialmente a los más vulnerables, de la discrecionalidad y los abusos, porque en un Estado de Derecho todos debemos cumplir la ley y nadie está por encima de la ley, la cual es igual para todos”, sentenció.
Así, apuntó que esta obligación, que rige para todas las personas, es especialmente exigible a las autoridades. “Los servidores públicos somos los primeros que debemos respetar las normas que nos rigen a todos”, dijo Piñera.
El Presidente planteó que “todos tenemos derecho a proponer cambios a la Constitución y las leyes, en aquellas materias que corresponda. Pero todos tenemos la obligación de respetar la Constitución y las leyes vigentes, incluso cuando esa Constitución y esas leyes no nos gusten”.
Allí propuso un paralelo en el marco de la gobernabilidad, “imaginen que pasaría si el Presidente abandonara su juramento de cumplir y hacer cumplir la Constitución y las Leyes y actuara al margen del Estado de Derecho”, ejemplificó el mandatario.
Piñera recordó, además, que la Constitución es muy clara. En su artículo sexto establece que los órganos del Estado deben someter su acción a la Constitución y garantizar el orden institucional de la República. Además, desde 1833, “todas nuestras constituciones establecen que ninguna persona, ni siquiera a pretexto de circunstancias extraordinarias, puede atribuirse más derechos que los que les confiere expresamente la Constitución y las leyes”.
El Presidente comentó que entre las principales causas que conducen a la destrucción de las democracias, está el no respeto a la Constitución y las leyes y el pasar por encima de la institucionalidad. Las instituciones y las reglas que rigen nuestro actuar se debilitan paulatinamente si “quienes ejercemos autoridad no asumimos, con voluntad y sin ambigüedades, el deber de respetar y hacer respetar la Constitución y las leyes”.
Ante el escenario actual legislativo del país, y las consideraciones presidenciales, el Presidente Piñera anunció que en los próximos días convocará a un grupo de exparlamentarios, académicos y expertos “para proponer perfeccionamientos a los criterios y procedimientos con que el Congreso determina la admisibilidad o inadmisibilidad de las mociones y proyectos de ley, de forma de evitar que progresen mociones que no respetan la Constitución”.
Asimismo, el jefe de Estado llamó a todos quienes tienen cargos de responsabilidad a trabajar unidos para superar los difíciles momentos que enfrentamos. A poner al Estado al servicio de la persona humana y la promoción del bien común. A seguir buscando acuerdos en beneficio de todos los chilenos. “Pero siempre, siempre, trabajando con unidad y buena voluntad en beneficio de todos y con total lealtad y respeto por nuestra Constitución y nuestras leyes”, cerró el Presidente. CHH
