Durante este sábado, las autoridades han continuado con la búsqueda del pequeño Tomás Bravo, el niño de 3 años cuyo rastro se perdió el miércoles 16 de febrero en Caripilún, zona rural de la comuna de Lebu, en la Región del Biobío.
Según detalló el prefecto regional (s) de la Policía de Investigaciones (PDI), Carlos Sanhueza, «desde el primer minuto, ha llegado personal de apoyo proveniente de Santiago, que son expertos en la materia de búsquedas de personas, además de guías caninos y peritos forenses, un grupo que se ha conformado en el ámbito investigativo de acuerdo a las directrices que el mando está realizando».
«En el plano investigativo, la Brigada de Homicidios, en conjunto con este grupo disciplinario, están llevando a cabo la investigación de los diferentes cursos de acción que existen de acuerdo a las hipótesis: que pudo haber sido un hecho accidental, que pudo haber existido la desaparición del menor o, por sobre todas las cosas, haber existido la intervención de terceras personas», aseguró el uniformado.
Asimismo, la autoridad destacó que «los oficiales expertos, acompañados de los guías caninos, han logrado delimitar un espacio no mayor a 8 kilómetros desde el punto cero donde se origina la desaparición del menor, a fin de cuadricular los espacios y buscar el indicio criminalístico que nos pueda dar la ubicación del menor». CHH