Durante la jornada de este martes 11 de octubre el Senado aprobó el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TPP11) -considerado como el tercer acuerdo comercial más grande del mundo- con 27 votos a favor, 10 en contra y una abstención.
La Cámara de Diputados lo aprobó en 2019 con un estrecho margen y, tras pasar varios años, el Senado retomó a finales de septiembre su discusión.
Este acuerdo busca eliminar o reducir barreras arancelarias en los 11 países miembros (Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Malasia, México, Japón, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam) y abarca un mercado de casi 500 millones de personas, lo que representa el 13% del PIB mundial.
Cabe mencionar que el Subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales, José Miguel Ahumada, aseguró a inicios de mes que el Gobierno no hará el depósito final del TPP11.
Lo anterior, hasta que no tengan respuesta de todos los países del tratado por la estrategia de las cartas bilaterales o side letters.
Las side letters son “acuerdos bilaterales entre países signatarios de un acuerdo plurilateral, en que se acuerdan ciertas normas específicas entre dichos países”.
Esto quiere decir que entre países de bloque, de común acuerdo, se pueden tomar ciertas determinaciones sobre las normas del TPP-11. Ejemplo de esto son interpretarlas de cierto modo, adecuarlas o hasta dejarlas sin efecto. CHH