El pasado viernes 27 de diciembre, un hombre falleció mientras participaba de una manifestación en el centro de Santiago. Según precisan los antecedentes de lo ocurrido, la víctima murió luego de caer en una fosa de 1,8 metros perteneciente a Enel.
Testigos del incidente afirmaron que Mauricio Fredes, nombre con que se identificó a la víctima, huía del carro lanzaguas cuando cayó en esta fosa ubicada entre la Alameda y la calle Irene Morales. Además, afirmaron que al interior de la fosa había agua y cables energizados. Por esta razón, se presumió que la muerte del hombre de 33 años estaba relacionada a una descarga de energía eléctrica.
Sin embargo, tras realizar los peritajes correspondientes, el Servicio Médico Legal (SML) negó esa hipótesis y aclaró la causa de muerte. Según precisó el organismo en un documento enviado a la Fiscalía Centro Norte, el fallecimiento de Fredes se debió a asfixia por sumersión y no a electrocución. Asimismo, descartó participación de terceros. CHH