Casi 48 horas de silencio mantuvo el actual presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, luego del triunfo de Lula da Silva en la segunda vuelta de las votaciones presidenciales desarrolladas el pasado domingo.
“Como presidente y ciudadano continuaré cumpliendo todos los mandamientos de la Constitución”, dijo el actual mandatario sin mencionar la estrecha derrota, donde consiguió el 49,1% de los votos versus el 50,9% conseguidos por Da Silva.
En primera instancia, Bolsonaro rechazó los bloqueos que han desarrollado sus adherentes como forma de protesta por la derrota, sin embargo, estas manifestaciones las atribuyó a un «sentimiento de injusticia».
«Los actuales movimientos populares son fruto de indignación y sentimiento de injusticia de cómo se dio el proceso electoral», manifestó el presidente brasileño desde el palacio presidencial de Alvorada.
«Las manifestaciones pacíficas siempre serán bienvenidas, pero nuestros métodos no pueden ser los de la izquierda, que siempre perjudicaron a la población», añadió el jefe de Estado de Brasil, mencionando entre ellos el «cercenamiento del derecho de ir y venir«.
Asimismo, Bolsonaro indicó, sin mencionar a Da Silva, que «como presidente de la República y ciudadano, continuaré cumpliendo todos los mandamientos de nuestra Constitución«. «Siempre fui tachado de antidemocrático y, al contrario de mis acusadores, siempre jugué dentro de las cuatro líneas de la Constitución«, sostuvo. CHH
