Esta mañana la Subsecretaría de Telecomunicaciones de Chile (Subtel) dio a conocer los nuevos prefijos que se implementarán para evitar llamadas masivas no solicitadas.
Según señaló la entidad, la nueva normativa “establece la diferencia entre llamadas comerciales solicitadas y las que no son solicitadas” y tiene como objetivo “proteger a las personas de fraudes y se garantizan comunicaciones claras y confiables en su vida cotidiana”.
Para esto, fueron determinados dos prefijos: 600 para comunicaciones solicitadas y 809 para llamadas no solicitadas.
La nueva numeración garantizará que las llamadas recibidas de carácter masivo, sean solicitadas o no, no impliquen un fraude.
De acuerdo con lo establecido, las empresas tendrán seis meses desde la publicación en el Diario Oficial para implementar la numeración.
Después de este plazo, estará prohibido usar otra numeración para comunicaciones automatizadas y/o masivas.
¿Qué son las llamadas solicitas y no solicitadas?
La Subtel define como llamadas solicitadas son: “Todo servicio de información con fines publicitarios realizadas al usuario del servicio público telefónico a través de comunicaciones originadas de forma automatizada y/o masiva que han sido solicitadas o autorizadas por el usuario”. Ejemplo de estas llamadas son las que realizan instituciones como bancos.
En tanto, las llamadas no solicitadas son aquellas que “no han sido solicitadas o autorizadas por el usuario”.