Por Rocío Valenzuela, periodista Chicureo Hoy
Una “gran familia” es como define Patricio Alegría a la rama de fútbol de padres del Lincoln Intenational Academy de Chamisero, la que hace cinco años preside. Los Lincoln Dads, como se hacen llamar ellos mismos, se formaron en 2011, a partir de las ganas de jugar fútbol y de la inquietud de tener una rama propia integrada por los papás del Colegio Lincoln de Chamisero, como las que ya existían en otros establecimientos de Chicureo.
Tras recibir el apoyo del rector del colegio, los Lincoln Dads comenzaron sus entrenamientos en marzo de 2011 con 14 papás. Tras cinco años, el grupo ya cuenta con 45 integrantes y realizan actividades tanto deportivas como recreacionales de manera ininterrumpida.
Patricio recuerda que “los primeros años de la rama sólo entrenábamos dos veces a la semana en las canchas del colegio y jugábamos solamente algunos torneos que son exclusivos para apoderados de distintos colegios como la Father’s Cup, organizada por el Santiago College”. Patricio cuenta que “pasamos de solamente juntarnos a entrenar y a jugar, a conformar un grupo maravilloso y súper unido” que va más allá de los padres que integran el equipo. Las mujeres de estos “apoderados-futbolistas” conformaron el grupo Lincoln Moms, lo que fortaleció aún más a la “mega familia que somos hoy”, cuenta Patricio. “Como somos papás del mismo colegio, muchos tenemos hijos en el mismo curso, entonces nuestras mujeres y niños se conocen y así se van formando lazos importantes de amistad”, lo que los ha llevado a compartir desde los partidos de fútbol hasta veraneos y paseos en familia. “Tenemos una mística muy especial y nos apoyamos en todo momento”, remarca Patricio.
Profesionalismo y relación con otros colegios de Chicureo
Patricio explica que en estos cinco años la idea ha sido que la rama sea lo más profesional posible, en el sentido de tener buenos preparadores físicos, como el atleta chileno Sebastián Keitel, quien actualmente los entrena, y reconocidos entrenadores, como Jorge “Coke” Contreras, quien jugó en Chile para equipos como Colo Colo y la Universidad Católica y en otros países como España y México.
Esta consistencia en el trabajo de los dos equipos que conforman a los Lincoln Dads (Senir y Súper Senior) es lo que les ha permitido jugar en la Liga Oriente, una de las tres más importantes de Santiago, donde participan otros colegios de la zona. Patricio señala que la relación con las ramas de otros colegios de Chicureo es buena, y que si bien no se ha podido organizar una liga que los convoque a todos, sí se comparte a través de torneos o jornadas deportivas. “Tenemos muy buena onda con la rama del colegio Pucalán, Dunalastair, San José, San Nicolás Diácono, Verbo Divino”, por nombrar sólo a algunos señala Patricio, quien acota que “cada uno hace su copa e invita a los otros colegios de la zona. Se cobra una cuota de inscripción que es para financiar los premios y la organización en general”. Sin ir más lejos, este año y por primera vez, los Lincoln Dads esperan llevar a cabo la Copa Lincoln, que convocará a todas las ramas de padres de los colegios de Chicureo. Otra gran actividad planificada para este año es que en octubre viajarán a Lima para participar de un cuadrangular con otras tres ramas de apoderados de Perú y Uruguay.
Pero si de metas a largo plazo se trata, el presidente de los Lincoln Dads confiesa que aspiran a que de aquí a “cinco años nos convirtamos en una institución más sólida aún, con mayor número de integrantes y con distintas categorías según sus edades” para de ese modo “ser conocidos por ser la ‘familia Lincoln’”. CH H
