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Un doble valor tiene para el Cuerpo de Bomberos Colina-Lampa la fecha de hoy martes 30 de junio, y es que no solo se conmemoran 59 años de vida como cuerpo, sino que, además, se cumplen 169 años desde la fundación de la institución en Chile.
Corría el año 1851 cuando se determinó crear el primer cuerpo de Bomberos del país en Valparaíso, sin embargo, no fue hasta algunos años después, el año 1962, cuando el presidente de este entonces, Jorge Alessandri Rodríguez, instauró de manera oficial la conmemoración a través de una ley que reconoce la honorable labor de estos profesionales.
Ambas fundaciones tienen un importante significado para Sebastián Benítez, comandante del Cuerpo de Bomberos Colina-Lampa, quien hoy mira con orgullo cómo se ha afianzado la organización a lo largo de los años, que hoy día con siete compañías que cumplen esta arriesgada labor.
Su interés por participar en la institución comenzó desde muy temprano. «Desde niño siempre tuve a los Bomberos como un referente, y si bien no tenia familiares bomberos, desde siempre quise ser parte», contó en conversación con Chicureo Hoy. Apenas cumplió 17 años, entró a la 1a Compañía de Colina, y comenzó a instruirse como voluntario. Hoy cumple 16 años en la institución y nueve como comandante, lo que «ha sido un gran honor», destacó.
En esta línea, Benitez explicó que Bomberos tiene una manera especial de seleccionar a sus representantes, y no tiene que ver con la cantidad de años u otros requisitos, sino que se eligen de manera democrática. «Somos nosotros mismos, año a año, los que elegimos a quien queremos que nos administre, tanto a nivel general como a nivel de compañía, por lo que es un gran honor que la gente reconozca en uno el valor y liderazgo que puede ejercer para representar de mejor forma a la institución», sentenció el comandante.
Hechos que marcan
Sin embargo, más allá de su rol administrativo, a la hora de asistir a una emergencia, Sebastián Benítez es como cualquier otro voluntario, y dentro de la institución ha vivido hechos que lo han marcado tanto a él como a sus compañeros.
De estos, recuerda con especial énfasis el terremoto del 27 de febrero de 2010. «Yo creo que sin duda dejó una marca en la gran mayoría de nosotros», precisó, rememorando que «fueron horas, días y semanas de trabajo intenso, en los que teníamos que batallar con incendios, rescates y accidentes que pasaron por este desastre natural, sin ni siquiera poder ver a nuestras familias».
En tanto, destacó también las dificultades que tiene Bomberos para trabajar producto de la pandemia. Según indicó, «ha sido difícil, súper complejo», sobre todo considerando que las emergencias siguen estando «a la orden del día y nos hemos visto en la obligación de reducir nuestras dotaciones en los distintos cuarteles», explicó.
Sumado a lo anterior, el comandante señaló que se han visto en la obligación de acuartelar voluntarios por más tiempo para reducir los contagios, y añadió que incluso ha habido voluntarios que han contraído el virus. «Ha sido complejo a la larga, pero hemos ido tomando los resguardos para poder seguir atendiendo las emergencias y brindando respuestas a la comunidad», sentenció.
Hoy y el futuro
El comandante envió hoy en su día un afectuoso saludo a todos los voluntarios del Cuerpo de Bomberos Colina-Lampa y a todos los bomberos en Chile. «A seguir manteniendo la moral en alto, sobre todo en los momentos difíciles que estamos viviendo», afirmó, reconociendo que «represento a todos cuando digo que es un orgullo para todos pertenecer a la institución más linda y mejor valorada de Chile».
Para el futuro, espera que la institución siga creciendo a nivel local , y pronostica que junto con el crecimiento de las comunas de Colina y Lampa, «podríamos en unos años tener incluso unas 2 o 3 compañías más».
En tanto, asegura que «vamos a seguir trabajando y aprovechando los recursos que tenemos para seguir atendiendo a nuestra comunidad». CHH